Dejo aquí testimonio del pesar por la obligada y definitiva ausencia de nuestro querido Manolo Verdugo: Sera quidem tanto struitur medicina dolori.
Un mal paso (Un microrrelato sin pretensiones)
Cuando ella se sentó frente a él, sólo tuvo que bajar la mirada hasta su boca para que la incontenible mueca de asco de la mujer le confirmara lo que ya sabía desde que entró. El insorportable hedor de excremento de perro que subía desde su zapato había estropeado irremediablemente la cita amorosa más esperada de toda su vida.
El gorrión cojo de La Chiclanera
Cual para el buen tenista cada bola
con volea de golpe delicado.
Como vallas el atleta esforzado
va saltando sutil a mil por hora.
Como el respingo plata de las olas
acaricia la orilla en el verano,
migajas de un mínimo pan tirado
el gorrión picoteaba sin demora.
Soñaba la fortuna de estar vivo
el pájaro hace apenas un minuto
y ahora es dueño solo de su gloria.
Dicha inmensa de un mínimo destino
que mimara la vida sin futuro,
y que a la muerte enfrenta su victoria.
Un faisán en Eufratelli
Cabe el mar apacible
de la noche lunera,
carne y vino.
Si envuelto en aromas
de húmedo lecho marino
se hace el aire esta noche,
aquí respira mi plato pura tierra
del colorín de un faisán
de brezo y romero.
Carne oscura que abriga
la soledad y el desconsuelo
del caminante y reclama
el perfume de otra tierra
que se hizo vino
en una bodega del Duero.
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